miércoles, 25 de febrero de 2009

Otra de Wachilandia


Esta es una de las finuras que te pueden ofrecer afuera del metro “Estación del norte”. Como pueden ver, sin duda es un servicio de “Hi class”. Me pregunto qué será eso. ¿Acaso son de las que saludas y ya directo al tema? Por 200 pesotes no se puede esperar menos.

lunes, 23 de febrero de 2009

10 km MVS


Antes que todo me gustaría agradecerles a todos los votantes de la encuesta por su "confianza" en un servidor para la carrera de 10 km de MVS. Al 41% que dijo que me dormía y que no llegaba a la carrera, les digo que me levanté desde las 5:30 am para llegar ya bien despierto al evento. Al par de infelices que dijeron que me desmayaba a los 5 km, les comento que se equivocaron pues los pasé sin mayor problema, aunque el desmayo casi se da al terminar la carrera. Los que pensaron que llegaría gateando a la meta, pues la verdad no quedaron muy alejados, pues faltando 1 km decidí apretar el paso pero el gas sólo me duró como 300 metros y tuve que jadear los 700 restantes. Finalmente una felicitación a quien sea responsable del atinado voto por “terminará la carrera”, pues eso fue lo que ocurrió.
Con un tiempo de 1:00:10 concluí mi primera experiencia en este tipo de eventos. Si bien mi objetivo inicial era correr por debajo de la hora, puedo darme el lujo de perdonarme esos 10 segundos debido al escaso entrenamiento que tuve por varios compromisos de otra índole que imperaron en mi agenda. Algunos les dicen pedas… yo prefiero llamarlos compromisos.
Mi segundo objetivo era ganarle a mi primo Carlos y ese sí que lo conseguí. Desafortunadamente no contaba con que mi prima Claudia me abofetearía, por lo que no pude ser el ganador de la familia. De la participante Indra, amiga de mi prima, mejor ni hablamos porque la señorita se da el lujo de hacer triatlones, así que ya se podrán imaginar su resultado.
Hablando un poco de la carrera propiamente, hubieron varias situaciones que me llamaron la atención. Para hacer esto más digerible se las expondré a manera de listado.
1- Hubo una gran afluencia de corredores, 6179 para ser exactos.
2- La organización no dejó nada que desear. Fue mi primera carrera, por lo que no tengo punto de comparación con otras, pero aún así creo que cualquiera pudo quedar satisfecho.
3- Durante el trayecto iban corriendo algunos tipos vestidos con su traje de Gatorade, de esos completos como los que usaba Ana Guevara. Los muy gilipollas iban gritando “¡ánimo, vamos, venga, échenle ganas!”, y al menos un servidor, tuvo ganas de acomodarles un par de bofetadas o de meterles el pie para que se partieran toda su mandarina en gajos.
4- En contraparte, las porras de los espectadores eran sin duda un gran aliento para seguir corriendo a pesar del evidente cansancio. Aunque con toda seguridad ninguna iba dirigida a mí, me tomé la libertad de adoptar todas como si vinieran de mis mayores fans.
5- Fue realmente loable y admirable la participación de personas con discapacidades (“capacidades especiales” mis huevos) que se aventaron todo el trayecto y con tiempos más que destacados.
6- Se pudieron ver todo tipo de excentricidades en los participantes de la carrera, tales como un Chapulín colorado, personas con sus perros, un tipo llevando a su bebé en la carriola, entre otros.
7- Todavía no acabo de decidir si me agradó o no la “disco” que pusieron los de EXA bajo el puente. Sé que la idea era animar a los corredores, pero tenían las mismas probabilidades de hacerlo que de que marearlos con las luces multicolores y la música, típica de EXA, a todo volumen.
Ahora solo queda mirar para adelante en busca de nuevos objetivos. Algunos ya saltan a la vista; otra carrera de 10 km en menos de un mes en donde se buscara mejorar el tiempo; la carrera de 16 km que servirá para saber si el reto final es viable o es simplemente una utopía… el medio maratón.